martes, 29 de abril de 2008

Y si Stiglitz sí sabe....

...como se hace, porque no nos cuenta???.

El otro día ya no se si en este blog o en otro lado le preguntaba a Lindhal si había alguna alternativa al "enfriamiento".
Esta mañana, tal como a Larry, me sorprendió gratamente ver estas declaraciones de Stiglitz en el Cronista y en la Nación, aunque si leen ambas notas veran las diferencias que tienen los editores de cada diario al poner los títulares.

Como ya se imaginan esta es la frase que llamó mi atención "La solución no es desacelerar la economía, pero sí incrementar la oferta y moderar la demanda en esos sectores puntuales, intentando mantener la mayor tasa de crecimiento posible y de una manera rápida" en la nota del Cronista y esta en la nota de La Nación "El problema es que las recetas tradicionales no sirven para bajarla porque gran parte de este fenómeno se debe a la apertura de las economías. Si la Argentina u otro país desacelera su economía o usa metas de inflación, no tendrá ningún efecto positivo, pero sí mayor desempleo. Debe evitar las soluciones tradicionales"

Lástima que los amigos periodistas no le insistieron para que se explayara con más detalles sobre las soluciones alternativas, no?.


p.d. Stiglitz es autor de dos manuales sobre finanzas públicas, uno con Atkinson y otro en soledad, tendrá algo que ver con su visión distinta del problema argentino? cuac!!!

lunes, 28 de abril de 2008

Dopaminas forzadas

Voy a confesar la razón de mi amargura con este gobierno, porque sino parezco una protestona recalcitrante.

Si bien es más fácil decirlo que hacerlo, la situación en la que el país está ahora se podría haber evitado con un buen manejo del ciclo económico, lo que suele ser el objetivo de las políticas económicas. La idea es evitar las fluctuaciones exageradas a fin de potenciar el crecimiento de largo plazo. En el caso actual, da toda la impresión que la economía lleva por lo menos dos años creciendo por encima de su potencial, que el potencial no aumenta, porque para eso tiene que mejorar la oferta de factores – capital y trabajo – y la infraestructura, y que cuando uno sigue dándole impulso, sea este monetario o fiscal, a una economía que crece por encima de su potencial, se recalienta. Los signos de una economía recalentada son los cuellos de botella y, claro, las presiones inflacionarias. Eso pasa porque se está consumiendo, invirtiendo, exportando, o todo eso junto, bastante por encima de la capacidad de producción o, lo que es lo mismo, porque la oferta global de la economía es inferior a la demanda. Si la inflación se sale de cauce, el resultado final es que la economía se termina frenando a la fuerza, se produce una recesión, aumenta el desempleo y nos encontramos en el medio de todas las miserias. Es lo que los economistas llamamos la resaca del recalentamiento.

Aunque alguna gente se niegue a reconocerlo, la ley de la oferta y la demanda se sigue cumpliendo pese a todo. En el mercado de bienes, si en la economía se demandan más bienes de los que ésta está en condiciones de producir, suben los precios. En el mercado de trabajo, si la economía demanda más trabajadores de los que hay, los salarios tienden a subir. Así que analicemos lo que pasa en cada uno de los dos mercados.

En el mercado de bienes, cuando suben los precios, los empresarios tienen un incentivo para invertir y aumentar su producción, a no ser que exista alguna distorsión que los desincentive. Desincentivos para invertir no es justamente lo que suele faltar en Argentina. La historia, nomás, ya es un desincentivo suficiente. Agregarle gritos, controles de precios, impuestos desorbitados y malos tratos no lo arregla. Si los empresarios no invierten, aumentan las presiones inflacionarias, porque al no aumentar la producción, la oferta de bienes no alcanza a satisfacer la demanda. En una economía abierta, aumentaría la importación de bienes, lo que después de un cierto período de tiempo terminaría deteriorando la cuenta corriente, lo que no queremos, porque Argentina para crecer necesita exportar más de lo que importa. Y como necesita exportar más de lo que importa, y al mismo tiempo los argentinos también tienen que vivir, necesita producir más.

Por el lado del mercado de trabajo, pasa más o menos lo mismo. Cuando aumenta la demanda de trabajo y hay recursos ociosos porque hay desempleo, aumenta el empleo y ya está. En cuanto no hay más gente desempleada, el salario empieza a aumentar. Cierto, en Argentina todavía hay un montón de gente sin trabajo, pero hay una enorme masa de gente que no está en condiciones de ingresar a ningún mercado de trabajo porque ni siquiera tienen las calificaciones mínimas necesarias para participar en un mercado de trabajo moderno. La única forma de solucionar eso es a través de la educación y la formación. Un país que lleva años desinvirtiendo en eso, no puede esperar ningún milagro. La tasa natural de desempleo en Argentina es altísima por culpa de la falta de educación de la gente y el desajuste consiguiente entre la oferta y la demanda de trabajo. Si el desempleo está por debajo de esa "tasa natural", la economía alcanza el pleno empleo mucho antes de alcanzarlo en realidad, las presiones salariales aumentan y con ellas la inflación. No hace falta crecer a marchas forzadas para disminuir el desempleo, porque sin más educación va a haber pobres sin trabajo de aquí hasta el fin de la historia.

Lo normal si uno quiere seguir creciendo sin que la economía se recaliente es intentar aumentar el crecimiento potencial, que es lo mismo que decir la capacidad de crecer, de la economía, lo que se hace de dos formas a) educando a la gente para que aumente la oferta de trabajo calificado y b) incentivando la inversión. Si uno intenta hacerla crecer a la fuerza, al final, explota.

Eso es lo que no entiende Kirchner y sí entendía Lousteau (y Lavagna, y Miceli, y Peirano, y Prat-Gay, y Kiguel, y Bein, y Lo Vuolo, y Lozano, y Altamira, y Lindahl, y yo….). Forzar un recalentamiento es de locos.

A ver si ahora lo termina entendiendo Musgrave, también, y se me deja de hablar de enfriamiento como si fuera una mala palabra. Al final, una economía recalentada se enfría sola, a la fuerza, y la resaca del día después suele ser de lo más fea. Igual, yo me temo que a esta altura ya sea tarde para evitarla. Pero, bueno, la verdad es que soy demasiado sensible a los alcoholes, sobre todo cuando mezclo.

sábado, 26 de abril de 2008

Planes de estabilización

Imperdible este paper de Calvo y Vegh para entender lo que se viene tarde o temprano.

Si seguimos con Néstor Kirchner como ministro de economía, y la recomendación del Escriba de que "acá hace falta más y más guita en los bolsillos de los trabajadores" (entonces imprimamos más billetes?), vamos a una inflación creciente.

Tarde o temprano entonces, se viene el plan de estabilización. Puede ser con el tipo de cambio o la oferta monetaria como ancla. En el primer caso, tendremos un boom corto inicial, pero ya vivimos varias veces los efectos nocivos de fijar el tipo de cambio. En el segundo, habrá si un ajuste inicial en la actividad económica, que debería revertirse pronto.

Lousteau quería subir los salarios y no lo dejaron

Los planes de estabilización en la Argentina aumentan los salarios reales (y el tipo de cambio real). Pavotes.

viernes, 25 de abril de 2008

Cierra los ojos

Si existiera la máquina del tiempo, a mí en este momento me gustaría meter a toda la Argentina adentro y volverla al 28 de octubre del 2007 a las 8 de la mañana.

Y ahora, cierren los ojos. Respiren hondo. Expiren. Relájense. E imagínense por un momento, con los ojos cerrados, que hoy el presidente fuera otro.

¿Me cuentan lo que vieron?

Lindahl Fernández informa

Y se fue Martín nomás. En los albores de su gestión lo describimos como "un socialdemócrata moderno, inteligente y con habilidad política. Es cierto que tendrá poco margen de maniobra, pero le deseo lo mejor para su gestión." Una pena. No pudo ser.

¿Qué significa la llegada de Carlos Fernández? De las opciones de Rollo, es "el dulce hacer poco", es decir, business as usual (o sea, Morenismo, De Vidismo, etc), con un poco de ajuste fiscal. Fernández es, al fin de cuentas, un especialista en temas fiscales. Si sale bien, siguen así, si sale mal, te queda todavía el plan de estabilización con Redrado, Blejer o Bob Lavagna.

PD: el título es para ver si ligo un cargo.

domingo, 20 de abril de 2008

Y dale con la separación de fuentes

En esta interesante nota, los dos entrevistados están de acuerdo en que seguir respetando el principio de separación de fuentes es el camino a seguir. Dicho principido es muy simple: la Nación tiene potestad exclusiva sobre unos impuestos y las provincias sobre otros. Este principio está plasmado en la ley 23.548 de Coparticipación Federal de Impuestos, pero contradice el art. 75 inc. 2 de la Constitución que habla de potestades concurrentes en los impuestos indirectos.

En este cuadro que alguna vez armé, se ve que los países en varios países exitosos en cuanto al federalismo fiscal prima el principio de concurrencia y no el de separación.

viernes, 18 de abril de 2008

Titanes en el ring

Héctor a Néstor: te levanto un opositor que aglutina

Néstor a Héctor: te ataco el negocio

Héctor a Néstor: amenazo con impulsar una reforma electoral que te perjudica

Néstor a Héctor: te cascoteo el negocio

Héctor a Néstor: te volteo algunos esbirros

Néstor a Héctor: preparate que te empomo el negocio


¿Será todo humo, como dice un émulo de Asis, o estaremos en los albores de un, en términos científicos, quilombo groso?

Para cerrar le pedimos si Ud, lector, ¿puede aportar datos de otras escaramuzas en este duelo?

Addendum, Héctor a Néstor: genero miedo, y tácitamente te culpo y te llamo incompetente.

jueves, 17 de abril de 2008

Que haya ido

El gran Dani está en la Argentina y, además de dar una conferencia en algún lado, acaba de publicar un artículo en su blog sobre nuestro paisito.

Y confirma lo dicho por aquí. Sí señores, Argentina tiene una oportunidad única y maravillosa para desarrollarse y el gobierno está por tirarla por la borda. Entre los errores que enumera Rodrik algunos son despropósitos políticos como el autoritarismo y la mala relación con los empresarios. Pero otros son despropósitos económicos, como los controles de precios, la inflación que se esconde con estadísticas mentirosas, los impuestos a las exportaciones y la intervención en los mercados cambiarios (!? ¿qué quiso decir con esto?).

Nada imposible de corregir, según Dani. Más disciplina fiscal, llevarse mejor con la gente y a seguir creciendo contentos. Y entonces, el cuento ése de la liebre y la tortuga será sólo eso, un cuento.

Ojalá la presi lo haya ido a ver a Dani Rodrik. O si no, que se lo hayan contado. Porque si algún día Turquía, haciéndole caso a su economista más famoso, se convierte en un país desarrollado y la Argentina no, sabremos en qué momento se perdió el tren.

(Eh, y que se acuerde que el derrame no le llega a los más pobres. Ahí el crecimiento solo no alcanza).

miércoles, 16 de abril de 2008

La servilleta de Duhalde

El otro día tomé un café en El General, y el mozo me dijo: "sabe quién se acaba de levantar de esta mesa?".

Mientras hablaba, vi que había quedado una servilleta con garabatos furiosos.

"El cabezón, Duhalde." termina el mozo.

Y en la servilleta decía:

Porotos míos

Inflación: pérdida de popularidad, presión sindical, déficit provincial = los gobernadores acatan pero miran pa´l costáu a ver si alguno con plan levanta cabeza. (je je, cabeza, yo)
Energía: los de mendicurren piden devaluta xq tuvieron que subir sueldos y encima no hay gas. Algunos cortes residenciales = menos popularidad. Suba de tarifas = menos popularidad.
Pelea con el campo: cae más la popularidad (30-35% dicen que anda hoy la cosa). No puede ceder xq entonces cualquiera le moja la oreja, pero si no cede sigue el bardo. Encima, los gobernadores y los intendentes empiezan a complotar. Dreams of Chapadmalal.
Pelea con Clarín: héctor olfatea que si empuja mucho, se cae. Empieza a empujar para negociar algunos temitas hoy, y en una de esas, se le pasa la mano. Sigue cayendo la popularidad.
Borocotismo: lo que falta es un candidato (éste? éste? éste?), pero la larga fila de heridos que dejó el tuerto estos años está esperando para dársela.

Porotos de Néstor

- 50 mil palos verdes de Martín.
- Viento de cola. (pero seguirá?)
- Todavía puede relanzar el gobierno (Blejer o Lavagna con plan de ajuste monetario y fiscal), arreglar con el campo y Clarín, etc.
- no tengo candidato

Conclusión

Por ahora me quedo piola, pero voy haciendo olas, pongo cara de estadista, y rosqueo, mucho rosqueo.



martes, 15 de abril de 2008

¡Buen día!

El Hombre de la Bolsa deja un comentario en el post anterior:

"Ana C., por qué no hace un post que diga solamente lo siguiente:

"El Banco sería independiente del poder ejecutivo, pero no del legislativo, que es el que lo controla. Y acuérdese que en una Argentina normal, el que tendría que decidir la política económica no es el ejecutivo, sino el legislativo, al que también elegimos entre todos."

Poniendo el legislativo en negrita.

Es lo mas lúcido que he escuchado en años.

Saludos.
Bolson."

Y como un comentario como ése, leído a las 7 de la mañana, contribuye decididamente a que una empiece bien el día, así lo hacemos.

lunes, 14 de abril de 2008

UMRP

Si esto no es sincronía cíclica, no hay sincronía cíclica en ningún lado del mundo.


Después de la crisis
Uruguay cumple cinco años de crecimiento

El PBI subió un 7,43% el año pasado


LANACION.com Economía Lunes 14 de abril de 2008



Me parece que hay dos países que no tendrían demasiados problemas en formar una unión monetaria. La Unión Monetaria del Río de la Plata.

Qué lindo. Nomás no sé qué nombre ponerle a la moneda.

domingo, 13 de abril de 2008

Retenciones, coparticipación y correspondencia fiscal

El conflicto campo-gobierno, volvió a poner sobre el tapete la coparticipación federal.
Esta semana se escucharon varias voces que piden reformar el regimen para que las retenciones sean coparticipables. El otro día le comentaba a Lindhal en unos de sus últimos y brillantes posts, si se acordaba cuando se debatía acerca de la falta de correspondencia fiscal de nuestro sistema. Para los no iniciados en estos temas, hay falta de correspondencia fiscal cuando por ejemplo un nivel de gobierno (provincias) financia sus gastos con recursos que recauda otro nivel de gobierno (nación). El problema es que quien decide los gastos no paga el costo polìtico que significa recaudar los impuestos que los financian.

Como dije por acá, me parece más interesante que las provincias avancen en un impuesto a las ganancias provincial.

En fin, quizás de todo este ruido salga algo interesante.

sábado, 12 de abril de 2008

Para detener al neoliberalismo salvaje, eficiencia

El estado de bienestar en Europa surgió en parte como respuesta a la amenaza del comunismo. Para los que no están en tema, la explicación resumida es: tenés al lado un país donde todos son iguales, mientras en tu país reina la desigualdad. Encima, el país vecino pone guita en tu país para fomentar la revolución. Solución: convencé (con plata, escuelas, hospitales) a tu clase obrera de que está mejor sin hacer olas.

En la Argentina hoy no hay mucho fervor revolucionario que digamos, ni Chile es comunista, asi que por ese lado no creo que venga la cosa. En cambio, siempre está la amenaza del neoliberalismo feroz, que como sabemos, siempre se impone a sangre y fuego, y encima en un contexto de globalización que nos aumenta la desigualdad. Entonces, para evitar el "backlash" neoliberal, el gobierno debería ir hacia un Estado más eficiente, que como sabemos, terminará en un estado de bienestar.

viernes, 11 de abril de 2008

Escriba, ¿estamos divididos?

El Escriba celebra en artepolítica que "En estos días de conflicto agropecuario asistimos al primer intento de un gobierno democrático post-83 de meterse con la renta extraordinaria de un sector de la economía. Primero, definiendo de manera técnica pero también política que allí hay una renta extraordinaria. Y luego mediante una decisión técnica pero también política en el sentido que esa renta extraordinaria puede ser apropiada por el Estado democrático."

Y más abajo dice que los argentinos estamos divididos:

"... estamos divididos entre quienes les interesaría tener un país para todos y quienes no. Quienes entienden que es legítimo que haya transferencias de un sector a otro y quienes no. Quienes solo piden “no me saques la mía y si me la sacás, haceme la ruta acá en la puerta de casa” y quienes entienden que “redistribuir” implica quitarle a unos para darle a otros. Incluso para sacar del campo y ponerla en la Ciudad. Quienes creen que es legítima una medida de fuerza patronal por tiempo indeterminado con cortes de rutas nacionales y quienes no. Quienes creen válida la acción del Estado democrático y quienes no. Quienes consideran algo deseable que se logre alguna vez una distribución igualitaria del ingreso en la Argentina y quienes se llenan la boca hablando de eso pero piden a la vez dejemos-tranquilos-a-todos."

Revisemos, pero creo que por objetivos, estoy del lado del Escriba. Yo quiero un país para todos, entiendo que es legítimo que haya transferencias de un sector a otro, entiendo que redistribuir implica quitarle a unos para darle a otros, creo válida la acción del Estado democrático y considero deseable que se logre alguna vez una distribución igualitaria del ingreso en la Argentina. Tengo dudas con la legitimidad de la protesta del campo, pero comparado con lo demás en lo que creo concordar con el Escriba, me parece un tema menor. (además tengo dudas, no digo de movida que sea legítimo).

Sin embargo, en esta coyuntura me encuentro en contra del Escriba, porque me opongo a que las retenciones móviles sean tan altas. Acá explico cuál me parece el sistema ideal (impuesto a la tierra y tarjeta alimentaria), y adoy mi posición sobre lo que considero factible en el contexto actual (dejar las retenciones móviles, pero bajar la curva para que el productor no enfrente un precio fijo).

¿Cómo puede ser? Compartimos los objetivos pero no los instrumentos. Descarto que entendemos cosas similares por los objetivos (de los ejemplos que hay en la tierra, acercarnos más a Suecia que a EEUU, ponele), entonces debe ser que disentimos respecto de lo que implican los instrumentos para el logro de los objetivos comunes.

No se cómo imagina el Escriba la transición desde la Argentina de hoy hacia una más integrada, igualitaria, próspera, etc, pero me interesa mucho escucharlo. Lo que yo me imagino es ir en la dirección que están eligiendo varios países hermanos (Chile, México, Brasil) y en la que fueron, según el historiador Peter Lindert acá, los países que hoy nos gustan: impuestos y gasto público más eficientes. Repito, por si no quedó claro: los países que hoy son los más equitativos y con Estados más grandes son aquellos que lograron implementar sistemas tributarios y programas de gasto más eficientes. (léase "eficientes" en la acepción más neoliberal que se le ocurra. por ejemplo, impuestos a los ingresos personales y al consumo vs. impuestos "distorsivos" al capital y al comercio exterior)

Es obvio entonces que yo no veo a las retenciones con tasa marginal de 95%, prohibiciones a las exportaciones, subsidios discrecionales y poco transparentes a diversas industrias, controles de precios, manipulación de índices estadísticos y demás como los instrumentos correctos. Por el contrario, creo que reducen el crecimiento, fomentan la corrupción, deslegitiman al Estado democrático (dándole letra a los Solanet del mundo) y a la larga, como muestra la experiencia histórica, nos dejan con un Estado más débil y menos redistributivo.

Si creo, como escribí acá y acá, que tenemos que cobrar más impuestos a las ganancias personales, combatir la evasión y mejorar la calidad del gasto.

Y ahora, lector, inserte Ud. aquí el remate final que demuestra irrefutablemente que tengo razón y el Escriba está equivocado. Yo no puedo, porque me entró la duda. Quizás esta pésima política sea un primer paso que instala la necesidad de cobrar impuestos, y más adelante una reforma, posiblemente implementada por un nuevo gobierno que no quiere perder recaudación pero si crecer más, mejora la eficiencia.

jueves, 10 de abril de 2008

Retenciones y precios máximos: Todo por no leer un artículo?

Sigamos con el tema y el método planteado ayer por Lindahl. Desde hace un par de semanas estaba tratando de entender la lógica de la tablita de Lousteau. No lograba descular porque implementaron una estructura de alicuotas que implican precios máximos. Si, ya se que la medida tuvo un origen fiscalista, pero una cosa no implica la otra.
Hoy leía este post del Abuelo y en los comments encontré que Claudio decía esto:

"Le voy a restar trabajo al Abuelo

FOB: 100
Retención 40%

Cálculo: 100/1,40= 71,43 x 40% = 28,57.

Cuando la tasa de retención es del 40 por cada 100 el Estado retiene 28,5 y no 40.

¿Por qué 100/1,40 = FOB/1 + tasa de retención? Porque de acuerdo a la interpretación que se hace del Código Aduanero, y que avala el Depto. de Asuntos Jurídicos de Aduana se considera que el valor FOB al que se exporta es el valor bruto incluido el impuesto (¿creo que es así también con el IVA, no?)"

Con esta otra forma de calcular la retenciones armé un gráfico similar al que Lindahl tomó prestado de Ramiro.



Las lineas verde y roja replican el gráfico de Econometrica, mientras el precio FOB (linea verde) crece, el precio neto de las retenciones (linea roja) se aplana, resultando en un virtual precio máximo. Pero miren la línea azul, si las retenciones se calculan como dice el comentarista Claudio, el precio neto de la retenciones también crecería acompañando la dinámica del precio FOB.

Y entonces fui a la fuentes. El Código Aduanero dice:

"ARTICULO 735. – Para la aplicación del derecho de exportación ad valorem, el valor imponible de la mercadería que se exportare para consumo es el valor FOB en operaciones efectuadas por vía acuática o aérea y el valor FOT o el valor FOR según el medio de transporte que se utilizare, en operaciones efectuadas por vía terrestre, entre un comprador y un vendedor independientes uno de otro en el momento que determinan para cada supuesto los artículos 726, 727 ó 729, según correspondiere, como consecuencia de una venta al contado.

ARTICULO 737. – No obstante lo dispuesto en el artículo 735, se excluyen del valor imponible los derechos y demás tributos que gravaren la exportación".


El art. 737 parece ser lo suficientemente claro, los derechos de exportación (las retenciones) no se incluyen en el valor imponible, el precio neto sigue la trayectoria roja y por lo tanto la actual tabla de retenciones implica precios máximos.

¿Queda margen para una interpretación distinta? ¿En el MECON no leyeron el art. 737? Interpretaron lo contrario?

miércoles, 9 de abril de 2008

Confiscación al campo, según Bilardo y Menotti

Fuente: Econométrica





Los economistas somos como Bilardo, resultadistas. Metiste un gol ante un rival superior? Todos abajo a colgarse del travesaño. A los abogados en cambio les importa el proceso, cómo se hacen las cosas. Jogo bonito. Son Menottistas.



Por eso, (algunos) economistas entendemos a las retenciones móviles que implican un precio máximo como una confiscación, mientras que un abogado seguramente dirá "no, confiscación es cuando viene el Estado y te quita la propiedad directamente."



Supongo que en parte por esta diferencia futbolera es que no prosperan ni prosperarán los reclamos judiciales de los productores agropecuarios, pese a que la Constitución Nacional dice que :



Art. 17.- La propiedad es inviolable, y ningún habitante de la Nación puede ser privado de ella, sino en virtud de sentencia fundada en ley. La expropiación por causa de utilidad pública, debe ser calificada por ley y previamente indemnizada. Sólo el Congreso impone las contribuciones que se expresan en el artículo 4º. Ningún servicio personal es exigible, sino en virtud de ley o de sentencia fundada en ley. Todo autor o inventor es propietario exclusivo de su obra, invento o descubrimiento, por el término que le acuerde la ley. La confiscación de bienes queda borrada para siempre del Código Penal argentino. Ningún cuerpo armado puede hacer requisiciones, ni exigir auxilios de ninguna especie.


PD: Ninguno de los argumentos a favor de las retenciones móviles justifican un precio máximo. Y gran parte de la ira que llevó a los cortes de ruta fue por este punto. Encima, es poco probable que alguna vez el gobierno cobre retenciones más altas, porque los precios están bajando (gracias Olivera por el link) y además el último aumento parece más producto de la especulación que estructural. Es decir que el gobierno magnificó un conflicto por plata que nunca va a cobrar. Genios de la política no son, digamos.

martes, 8 de abril de 2008

Consejos para escribir mejor

No soy justo yo la que más ahorra espacio en este blog, ya que siempre me doy el gusto de escribir hasta que dejo dicho todo lo que quiero, pero como en el mundo de los blogs hay muchos artículos más que mejorarían muchísimo siguiendo los consejos de Paul Krugman, recomiendo que los lean.

Y dos lindas frases que aparecieron en los comentarios a ese post:


"La perfección se alcanza, no cuando no hay nada más que agregar, sino cuando no queda nada más que quitar".
Antoine de Saint-Exupery


"Como no tenía tiempo de escribir una carta corta, escribí una larga".
Mark Twain


A propósito, la columna a la que hace alusión Krugman en su meta-post es esta joyita. Que hasta nombra a la Argentina.

Cuando veas las barbas de tu vecino cortar.....

Me rindo, es imposible no seguir posteando sobre las retenciones. Así que enarbolo una bandera blanca y vamos para adelante.

Hoy encontré dos notas que me dispararon un par de ideas. La primera nos cuenta que si se eliminan las retenciones las provincias verían incrementarse las transferencias que reciben por coparticipación en $4.500 millones. La eliminación de las retenciones incrementaría las ganancias de los productores en más de $46.300 millones, quienes entonces pagarían más de $13.000 millones extra en concepto del impuesto a las ganancias. Como a diferencia de las retenciones, este impuesto si es coparticipable, las provincias recibirían un ingreso extra por el monto ya mencionado.

Según la nota las retenciones recaudarían más de $32.000 millones. Es decir que si se eliminan, en el mejor de los casos la recaudación bajaría en $18.000 millones.

Y mientras pensaba esto, leo esta segunda nota. Lula tuvo que recortar el gasto en u$s 11.400 millones, debido a que a fines del 2007, el congreso no prorrogó la vigencia del impuesto al cheque brasilero, el CPMF que recaudaba u$s 23.000 millones. No pude encontrar el detalle sobre que gastos serán recortados.

En el hipotético caso que eliminen las retenciones, qué gastos se eliminarían del presupuesto para compensar la baja de $18.000 millones?. La otra vez cuando hacíamos una pregunta similar El Abuelo nos recomendaba leer esto. Ya lo hicimos por segunda vez y seguimos esperando la publicación del informe completo para poder evaluar las estimaciones fiscales.

Como ya decíamos acá, hay otros amigos que tambien piensan que la suba de retenciones obedeció a una necesidad fiscal. Y entonces...

Además, si los nuevos defensores del federalismo triunfan y las retenciones se coparticiparan,el bache fiscal sería similar. Claro que para coparticiparlas hace falta una nueva ley de coparticipación y entiendo yo que también una reforma constitucional, pero ese es otro tema.

Por ahora, sigo leyendo propuestas que implican una baja del gasto público. Y entonces me parece que como dice el refrán, habría que empezar a poner las barbas a remojar...

domingo, 6 de abril de 2008

Mirando hacia el Norte

Mientras seguimos el día a día, se nos pasó por alto mirar que pasa allá en el gran país del Norte. Ayer Paul Krugman nos contaba como prometen solucionar la crisis financiera los tres candidatos, Mc Cain, Clinton y Obama. El mismo PK nos contaba los antecedentes no tan auspiciosos del principal asesor económico de Mc. Cain. Y recuerdo haber leído por ahí que Obama es asesorado por un chicago boy. Ojalá que sea parecido al nuestro. No, Lindahl?

The coalition of the willing

Desde este blog lanzamos el llamado a la revolución fiscal, en respuesta al timorato de rollo, que proponía rebelión nomás. Y ahora tenemos más aliados. ¿Hasta dónde podrá el gobierno nacional seguir aumentando su participación en la torta fiscal expoliando a Hermes, Daniel, Juan, Mauricio y Celso?

¿Alcanzará con estos gobernadores, con la oposición y con los focos de rebelión del campo? Si la cosa sigue así, se juntan Carrió y Macri, un cacho del peronismo (el cacho derechoso) se suma, y chau pichu.

Como diría El Criador, se armaría un polo opositor al gobierno con epicentro en el cuadrante noreste del gráfico ostiguyano, que se extendería principalmente hacia sudeste, y confirmando finalmente la tesis de Torcuato di Tella sobre bipartidismo "normal".

No creo, porque como dijo Musgrave abajo, a Scioli lo tienen - digámoslo en francés - agarrado de las bolas, y sin La Provincia, no vamos a ningún lado.

Pero lanzo ya mi predicción para el 2011: el líder de la oposición es Mauricio Macri, y la fórmula es Macri-Carrió.

sábado, 5 de abril de 2008

El dilema de Scioli

Vieron esta noticia? Se acuerdan de esto y de esto?

Ahora están pensando en modificar el impuesto a los ingresos brutos, lo que sería volver atrás con los pactos fiscales de los 90. Claro, esos pactos se hicieron por la necesidad de implementar devaluaciones fiscales para no perder competitividad. Con el tipo de cambio actual, las cosas han cambiado.
Se volverá a discutir la reforma de la coparticipación? No creo.

Mucha gente le pide a Scioli independencia política de CFK, claro que la independencia política viene con la independencia financiera. Si Montoya no sube la recaudación de impuestos provinciales será muy dificil. Pero los que le piden a Scioli que corte su vínculo con CFK son los que deberían pagar más impuestos.

Lindo rompecabezas...

viernes, 4 de abril de 2008

Contra la inseguridad: Guillermo Moreno



Fuentes de primer nivel informaron a este blog que sería inminente el traspaso de las fuerzas de seguridad a la Secretaría de Comercio Interior que comanda Guillermo Moreno.


La fuente, un alto funcionario cercano al matrimonio Kirchner que pidió no ser identificado, dijo que "ahora que tiene más tiempo, Néstor se copó con los blogs. leyó ésto, e inmediatamente citó a Moreno y a Fernandez (los cuatro) a Puerto Madero."
PD: Autor de la foto acá.

La inflación no es mi culpa ¿eh?

Me tenía bastante preocupada el Economist. Una de las cosas que más me gustan de mi revista preferida es que suelen tener bastante seguido notas sobre Argentina. A mí siempre me gusta pensar que es porque los ingleses se acuerdan con cariño de cuando Argentina era su segunda colonia, aunque a lo mejor es por otra cosa.

Pero últimamente nos tenían bastante abandonados. Hace algunos meses publicaron un artículo sobre el acceso de las clases populares a las clases medias en América Latina y en toda la nota a los únicos países que nombraban era a Chile, México y Brasil. De Argentina, ni una palabra. El artículo me dejó un poco triste, pensando si no sería porque Argentina quedó afuera de ese fenómeno. Durante las elecciones, hubo un artículo un poco antes y uno justo después, ni más ni menos lo mismo que le dedican a Dinamarca que, bueno, no suele ser ni de lejos el país que más aparece en el Economist.

Y ahora, tres seguidos. Primero, el de la liebre y la tortuga sobre el que Tavos escribió hoy. La semana pasada, uno sobre el paro del campo (ni huelga, ni lockout, caramba, paro es más neutral, sino me van a hacer caer en el correctismo político y voy a tener que inventar algo á la "la medida de fuerza aplicada por el sector agropecuario en respuesta a la política aduanera del gobierno nacional y popular", como le gusta a los suecos, campeones del eufemismo) y hasta una editorial!

Y hoy... Nada menos que una carta de Martín Redrado en la sección de cartas de lectores donde, enojado porque lo tratan de inflacionista, les dice que se informen un poco mejor antes de escribir nada y los trata de simplistas.

Redrado deja bien clarita cuál es la política monetaria del BCRA y la verdad, me parece de lo más coherente. Lo mejor de todo es que la explica. Tendría que haber artículos en los diarios todas las semanas donde los responsables de la política monetaria la expliquen, mostrando cómo se van cumpliendo las metas. Nomás parece un poco raro cuando dice que el BCRA no tiene metas de tipo de cambio. Y tendría que haber agregado que la mitad de la política antiinflacionaria se la dejaron a la política fiscal que no sabe muy bien por qué no está siendo todo lo efectiva que debiera ser.

(El dibujito se lo robé al Economist sin ninguna vergüenza, como suele ser mi costumbre, pero lo debe haber hecho un argentino. Mientras buscaba los artículos para poner en los links, me di cuenta que fui demasiado injusta, había montones de cosas sobre Argentina en los últimos 6 meses).

Repitiendo errores?

Vieron esta nota de Daniel Artana? Pensando en este tipo de recomendaciones, escribí esto.

En un país como la Argentina donde 60% de las exportaciones son commodities, y el resto se vende en su mayoría a Brasil, cuyo PBI en los últimos cuatro años ha aumentado más de 20% al año en dólares, asistimos a una «crisis de la abundancia» con el Estado tratando de aumentar su participación en el negocio agropecuario y quedarse con un porcentaje creciente en caso de que la bonanza continúe.

Pero detrás de este conflicto innecesario se esconde un problema más profundo: la necesidad del gobierno de aumentar sus ingresos para atender un gasto que no puede controlar adecuadamente. Al igual que en los 90, el gasto público, medido en dólares, crece desmesuradamente. El gasto primario de los tres niveles de gobierno (excluyendo intereses de la deuda) en un contexto de tipo de cambio fijo aumentó a un ritmo anual de 12% entre 1991 y 1995 (8% en la Nación). Desde 2003 a la fecha, el gasto primario ha aumentado a un ritmo anual promedio de 26% en dólares, (25% en la Nación). En los primeros meses de este año luego de cierta «moderación» el gasto continúa aumentando por encima de 30% anual en dólares. ¿Por qué los 80.000 millones de dólares de gasto primario no resultaron financiables a fines de los 90 y hoy se financian más de 100.000 millones? Una respuesta simple se puede ver en la línea punteada del mismo gráfico que ajusta el gasto en dólares por la evolución de
los precios de exportación. Es el nivel excepcional de los precios externos el
que permite que la economía privada tolere un gasto de 100.000 millones.

Pero aquí aparece un primer problema. Así como en los 90 parecía que siempre iba a lograrse financiamiento vía deuda para las actividades del Estado, hasta que éste se cortó, hoy parece que la bonanza de las materias primas puede continuar sosteniendo un gastoelevado. Pero si los precios se reducen, la línea punteada se acercaría a la llena y el gasto sería difícil de pagar.

Así como aparecieron límites a un endeudamiento sin freno, también hay límites para la voracidad fiscal. La Argentina se encamina a una presión tributaria del orden de 35% del PBI, similar a la de Brasil pero alrededor de 10 puntos del PBI superior a la que existe en los países exitosos de Asia emergente y al resto de Latinoamérica.

También es superior a la presión tributaria que tienen hoy Australia, Estados Unidos o Japón, todas sociedades mucho más igualitarias que la nuestra. Es cierto que una parte de la explicación reside en el origen diferente de la recaudación pero mucho se debe a la ineficacia del gasto estatal, asignatura pendiente de la dirigencia política
argentina, que siempre ha encontrado más fácil gastar más que gastar mejor. Y el mal ejemplo nacional se extiende a las provincias con aumentos de impuestos concretados en la Ciudad de Buenos Aires y propuestos para la provincia de Buenos Aires.

En la ineficacia del gasto aparece una nueva semejanza con los 90. La pista de Anillaco de entonces y el tren bala de hoy son ejemplos de una inversión pública guiada por criterios políticos y no de bienestar social. Y en la calificación de uno a diez sobre transparencia realizada por Transparency Internacional la nota Argentina del último año fue sólo 2.9 (máximo 10) similar al 3 de 1998 y 1999. Con niveles de corrupción
africanos, una parte del gasto seguramente se sigue perdiendo en el camino. Y mientras se aprueba una meta de mediano plazo de gastar 6% del PBI en Educación la calidad de la educación no parece mejorar y el objetivo del gobierno nacional parece limitarse a lograr 180 días de clase.

Desde el punto de vista macroeconómico la Argentina tiene hoy la ventaja de contar con un tipo de cambio flotante que podría ayudar a reducir el gasto en dólares si las circunstancias externas se vuelven menos favorables. Pero esa ventaja conceptual enfrenta algunas restricciones políticas. El gobierno ha mostrado en más de una ocasión temor a depreciar la moneda en circunstancias desfavorables y ahora se agrega una economía a pleno empleo con presiones inflacionarias. Es cierto que, en teoría, una depreciación real producida por la escasez de los dólares que hoy son abundantes sería un cambio de precios relativos, pero con la inflación por encima de 20% anual la depreciación nominal podría agravar los problemas de expectativas y hacer más difícil la corrección.

Para evitar estos contratiempos es que se aconseja ahorrar en las buenas actuando contracíclicamente. El año 2008, sin elecciones, era el momento ideal para mostrar moderación en el gasto (y también en la política de ingresos y en la monetaria). En cambio el gobierno nacional y varios provinciales han optado por la vía impositiva, camino más riesgoso si se revierte la bonanza. El conflicto agropecuario parece sugerir que se ha perdido un importante capital-político y que la moderación deberá esperar a 2010. El problema es si en el medio la recuperación de la economía americana viene acompañada, como es probable, de un fortalecimiento en el dólar y una suba en la tasa de interés que frenen los precios de las commodities, y la economía de Brasil se acomoda a tasas de crecimiento en dólares más acordes con su situación externa reciente.

El tiempo dirá si pisar el acelerador a fondo nos permite llegar más rápido a la meta final, lo único claro hoy es que el camino está cada vez más sinuoso y el conductor algo más mareado.

Cristina y Sabat



Es muy dificil postear sobre temas que no tenga que ver con estos "días interesantes" que nos tocan vivir.

Me quedé enganchado con esta polémica. En las radios y la tv por cable los periodistas han salido a defender a H. Sabat y a criticar el "exceso" de la presidenta al hablar de "mensaje cuasimafioso".

Yo entiendo que el dibujo pide que la presidenta se calle. Ustedes que piensan?

martes, 1 de abril de 2008

Estado de derecho

En Saber Derecho hay un muy interesante e ilustrativo post sobre el status legal de las retenciones. ¿Son constitucionales o no? Parece que los argumentos son muchos y variados y que el Derecho todavía es una ciencia menos exacta que la Economía.

En la discusión, en la que también se habla del artículo 76 de la Constitución Nacional que dio lugar a la Ley de Emergencia Económica, me entero de algunas cosas que no sabía. Gustavo Arballo y un nuevo comentarista llamado Rufus hacen un racconto del proceso de delegación tras delegación que ha llevado a una situación que hace que el Estado de Derecho en la Argentina sea una construcción bastante precaria.

Rufus dice:

"…Creo que una de las tantas herencias nefastas de los golpes de estado es el habernos acostumbrado a ver que el Presidente dicte normas de carácter legislativo, convirtiendo al Congreso en una escribanía. Estoy 100% convencido que, en nuestro país, la exagerada proliferación de normas legislativas dictadas por el Poder Ejecutivo obedece más a un problema de herencia cultural legada por los gobiernos de facto (hábilmente receptada por los políticos), que a una necesidad del estado moderno..."

(El comentario completo, acá, junto con otro montón de comentarios de lo más educativos)

Ulrich, ¿no tiene ganas de tener un co-blogger?

Y entonces....

Ayer miraba el programa de J. Morales Solá y los dirigentes del campo mantenían su posición de fuerza y se negaban a levantar la medida (ni paro ni lockout, los campos siguen produciendo, o no?). Yo no había escuchado a Lousteau, asi que no sabía cual había sido la propuesta del gobierno.

Esta mañana leo en la tapa del Cronista "cedió el gobierno...". Y no me queda otra que preguntarme y entonces...

Mariano T. dice que la propuesta es atractiva técnicamente, pero impracticable. Muchos pequeños productores no están registrados como tales en la ONCCA.

Cuando menos rústica es una politica económica, más información se requiere para ponerla en práctica.

Y el costo de contratar un contador que les lleve los papeles parece ser muy alto, y entonces...

En Capital, muchos jóvenes contadores recién recibidos hacen sus primeros palotes en la profesión llevándole los papeles a bolichitos y kioskos, repetir ese esquema en el campo es imposible?

La falacia de la renta extraordinaria

Axel Kicillof repite en Pravda12 el trillado y falaz argumento que el campo tiene que pagar retenciones porque sus ganancias son "renta extraordinaria". Rollo y Elemaco se ocupan de refutarlo.

Algo habíamos escrito acá, pero vamos por más, y esta vez, en tono de maestro ciruela:

1. El precio de un cacho de tierra en un sistema capitalista está dado por el valor presente ESPERADO de las ganancias futuras que genere la explotación de dicho cacho.

2. resalto "ESPERADO", porque existe incertidumbre sobre las ganancias futuras. El precio de los commodities puede subir o bajar, el gobierno puede aumentar o reducir los impuestos, el calentamiento global te puede afectar para bien o mal, granizo, choreo, etc, etc, etc.

3. Aceptémoslo de una vez: existe lo que Kicillof llamaría la "renta diferencial de la tierra". Es decir, UNA VEZ COMPRADO EL CAMPO, parte de la guita que ganás es porque tu campo de la pampa húmeda es más productivo que, no se, el Sahara, y no porque vos seas Henry Ford.

4. However, y acá está la clave, si me aceptaste el punto 1, entonces el punto 3 es irrelevante, porque en el momento que comprás el campo, YA PAGASTE EL VALOR PRESENTE ESPERADO DE LA RENTA DIFERENCIAL DE LA TIERRA, o sea que cuanto la "ganás", en realidad estás simplemente recuperando lo que ya pagaste.

5. pongamos un ejemplo para que se entienda. Supongamos que un campo en Santa Fe produce 1 tonelada de soja. Supongamos también que hay dos posibilidades: con 50% de probabilidad, China crece mucho y la soja vale $500 por tonelada. con 50% de probabilidad, hay una crisis en China y la soja vale $100.

Cuánto vale el campo? Bueno, el valor presente de la ganancia esperada (supongamos que el mundo termina mañana, como el silencio, que no hay costos y que la tasa de interés es cero) es de 0,5*100 + 0,5*500 = $300. Comprar el campo equivale a comprar cualquier otro activo con retorno esperado de $300 (y cierto riesgo). Un inversor averso al riesgo estará dispuesto a pagar algo menos que $300 por ese activo. Y esta cuenta es la que hace el capitalista cuando decide entre comprar un campo (o no vender el que tiene), comprar una fábrica o poner la plata en el banco. Que vos le subas los impuestos cuando se da el buen escenario de precio a $500 y no se lo subas, por ejemplo, a un hotel en Calafate cuando se rompe el Perito Moreno, es injusto y discriminatorio.