Este es un post muy aburrido, estrictamente técnico, fuera de tiempo en épocas de elecciones. Pero mi mente a veces se pierde por senderos desconocidos.
Aunque ustedes no lo crean, con Ana C volvimos a ser casi tan amigos como antes, pero claro nuestras discusiones ocurren por chat o por mail y no se hacen públicas. Hace unos días charlabamos sobre los impuestos a los cigarrillos, el tema fue que me picó el bichito nerd y me puse a investigar el tema.
Mis conclusiones van en contra de lo que he venido pensando y repitiendo en mis clases sobre el tema. Contra lo parece indicar un primer vistazo sobre la situación del mercado de cigarrillos, la presión tributaria sobre dicho mercado en Argentina no es baja sino que se encuentra en los niveles máximos en términos internacionales. Pero vayamos por partes y repasemos todos los escalones que nos llevan a otra zoncera tributaria.
Cualquier ser humano adicto a la nicotina que viaja a EEUU o a Europa vuelve sorprendido por lo caros que son los cigarrillos en esos lares. Y cuando ese pobre adicto se cruza con un economista se entera que en el primer mundo los impuestos al tabacco son pesados y entonces rápidamente se concluye que acá se pagan pocos impuestos a los cigarrillos. De hecho dicha zoncera ha sido repetida por quien suscribe infinidad de veces tanto en charlas entre colegas como en las aulas.
Con Ana C solemos decir que los impuestos a los cigarrillos tiene ganancias fiscales y de bienestar a aprovechar. Son el típico ejemplo de impuesto pigouviano y en todo el mundo se usan para desalentar a los fumadores (vgr. adictos a la nicotina). El eufemismo que estoy utilizando es interesante desde el punto de vista del análisis económico de los impuestos,si fumar es una adicción la demanda de cigarrillos es inelástica a variaciones de precios y por lo tanto, elevar la presión tributaria sobre ellos no genera perdida de bienestar. Ana C, me suele taladrar con la idea que las politicas de "libre de humo" u otras camapañas similares impulsadas desde el area de salud pública suelen acompañarse con fuerte subas del impuesto a los cigarrillos.
Pero paremos un poco con la sarasa y veamos los datos duros: En Argentina hay tres impuestos sobre los cigarrillos: el impuesto interno al tabaco con una alícuota de 60%, el impuesto adcional al precio de venta de los cigarrillos con una alícuota de 7% y el FET o Fondo Especial del Tabaco que alcanza una alicuota total de 8.35%. Es decir que en nuestro país presión tributaria sobre los cigarrillos alcanza el 75.35% del precio de venta al público.
Que pasa en el resto del mundo?
No se enojen , si clickean en el cuadro van a poder ver algo. Lo importante es que si miran en la columna (Excise % RSP) van a encontrar la alicuota que se le aplica en cada país al paquete de cigarrillos.
Sorprendentemente ninguna supera el 70%.es decir que la presión tributaria sobre los cigarrillos en Argentina es mayor que la tasas vigentes en cada uno de los países de la OCDE.
Sin embargo, en cuanto a UK y USA el informe de la OCDE nos cuenta que en ambos casos el impuesto es un monto fijo en el caso de UK es de 84,98 GBP por kilo en tanto que en los Estados Unidos la suma promedio es de 129 USD cada mil cigarrillos. En este último caso cada 20 cigarrillos se pagaría 2,58 USD con un precio promedio de 5 USD por paquete de cigarrillos, el impuesto sería equivalente al 100% del precio, lo cual nos da un nivel de presión tributaria récord. una situación similar se da en UK.
Como nos gusta pensar a los profesores de finanzas públicas los impuestos pigouvianos tienen una reminiscencia al puritanismo protestante, este relato es consistente con que sean los dos grandes países protestantes quienes tengan los niveles más altos de impuestos a los cigarrillos.
En este momento es importante recordar que el impuesto adicional sobre el precio del paquete de cigarrillos tenía una alícuota del 21% que fue reducida al 7% en el 2000 y mantenida en dichos nivel desde entonces.
Si sumamos 75.35 + 14 = 89.35 lo que pondría la presión tributaria a niveles protestantes.
Asi que mi Ana C, tenés razón, hay espacio para subir los impuestos a los cigarrillos y recaudar un par de miles de millones de pesos sin generar distorsiones.
update: encontré está web donde podemos ver que la sensación sobre lo barato que son los cigarrillos en nuestro país tiene un componente de cipayismo bastante alto.
Aunque ustedes no lo crean, con Ana C volvimos a ser casi tan amigos como antes, pero claro nuestras discusiones ocurren por chat o por mail y no se hacen públicas. Hace unos días charlabamos sobre los impuestos a los cigarrillos, el tema fue que me picó el bichito nerd y me puse a investigar el tema.
Mis conclusiones van en contra de lo que he venido pensando y repitiendo en mis clases sobre el tema. Contra lo parece indicar un primer vistazo sobre la situación del mercado de cigarrillos, la presión tributaria sobre dicho mercado en Argentina no es baja sino que se encuentra en los niveles máximos en términos internacionales. Pero vayamos por partes y repasemos todos los escalones que nos llevan a otra zoncera tributaria.
Cualquier ser humano adicto a la nicotina que viaja a EEUU o a Europa vuelve sorprendido por lo caros que son los cigarrillos en esos lares. Y cuando ese pobre adicto se cruza con un economista se entera que en el primer mundo los impuestos al tabacco son pesados y entonces rápidamente se concluye que acá se pagan pocos impuestos a los cigarrillos. De hecho dicha zoncera ha sido repetida por quien suscribe infinidad de veces tanto en charlas entre colegas como en las aulas.
Con Ana C solemos decir que los impuestos a los cigarrillos tiene ganancias fiscales y de bienestar a aprovechar. Son el típico ejemplo de impuesto pigouviano y en todo el mundo se usan para desalentar a los fumadores (vgr. adictos a la nicotina). El eufemismo que estoy utilizando es interesante desde el punto de vista del análisis económico de los impuestos,si fumar es una adicción la demanda de cigarrillos es inelástica a variaciones de precios y por lo tanto, elevar la presión tributaria sobre ellos no genera perdida de bienestar. Ana C, me suele taladrar con la idea que las politicas de "libre de humo" u otras camapañas similares impulsadas desde el area de salud pública suelen acompañarse con fuerte subas del impuesto a los cigarrillos.
Pero paremos un poco con la sarasa y veamos los datos duros: En Argentina hay tres impuestos sobre los cigarrillos: el impuesto interno al tabaco con una alícuota de 60%, el impuesto adcional al precio de venta de los cigarrillos con una alícuota de 7% y el FET o Fondo Especial del Tabaco que alcanza una alicuota total de 8.35%. Es decir que en nuestro país presión tributaria sobre los cigarrillos alcanza el 75.35% del precio de venta al público.
Que pasa en el resto del mundo?
No se enojen , si clickean en el cuadro van a poder ver algo. Lo importante es que si miran en la columna (Excise % RSP) van a encontrar la alicuota que se le aplica en cada país al paquete de cigarrillos.
Sorprendentemente ninguna supera el 70%.es decir que la presión tributaria sobre los cigarrillos en Argentina es mayor que la tasas vigentes en cada uno de los países de la OCDE.
Sin embargo, en cuanto a UK y USA el informe de la OCDE nos cuenta que en ambos casos el impuesto es un monto fijo en el caso de UK es de 84,98 GBP por kilo en tanto que en los Estados Unidos la suma promedio es de 129 USD cada mil cigarrillos. En este último caso cada 20 cigarrillos se pagaría 2,58 USD con un precio promedio de 5 USD por paquete de cigarrillos, el impuesto sería equivalente al 100% del precio, lo cual nos da un nivel de presión tributaria récord. una situación similar se da en UK.
Como nos gusta pensar a los profesores de finanzas públicas los impuestos pigouvianos tienen una reminiscencia al puritanismo protestante, este relato es consistente con que sean los dos grandes países protestantes quienes tengan los niveles más altos de impuestos a los cigarrillos.
En este momento es importante recordar que el impuesto adicional sobre el precio del paquete de cigarrillos tenía una alícuota del 21% que fue reducida al 7% en el 2000 y mantenida en dichos nivel desde entonces.
Si sumamos 75.35 + 14 = 89.35 lo que pondría la presión tributaria a niveles protestantes.
Asi que mi Ana C, tenés razón, hay espacio para subir los impuestos a los cigarrillos y recaudar un par de miles de millones de pesos sin generar distorsiones.
update: encontré está web donde podemos ver que la sensación sobre lo barato que son los cigarrillos en nuestro país tiene un componente de cipayismo bastante alto.