lunes, 12 de julio de 2010

Percepción sobre inflación

Tenía que pagar unas cuentas y entré a la página web de mi banco. Al cerrar, se me apareció la encuesta que ilustra este post, preguntándome "¿Pensás que el indicador oficial de la inflación en tu país refleja con exactitud la verdadera tasa de inflación?"

No la contesté, porque los economistas sabemos la trampita de la pregunta, y me fui derechito a ver qué habían respondido los belgas. Tal como lo esperaba, la mayoría de la gente dice que no.

En los países donde la inflación se mide con métodos reconocidos y aprobados (y hasta ahora nunca escuché que en Bélgica no sea así, pero nunca se sabe), la gente tampoco cree que la inflación oficial es la verdadera inflación. Le pasa a los alemanes, los españoles, los italianos y, por lo visto, también los belgas.

Las razones son dos, por lo menos. Una es que la inflación oficial es la tasa de inflación promedio de la economía, no la de cada persona. Si mi canasta de consumo personal es distinta de la canasta promedio, la tasa de inflación de las cosas en las que yo gasto será distinta de la inflación oficial, y mi percepción de inflación distinta.

La otra es una especie de espejismo psicológico. La gente tiende a pensar en la inflación como el aumento de los precios en esas cosas en las que gasta más seguido, no en las que gasta más. Si uno toma tres cafés y compra un diario todos los días, llena el tanque de nafta del auto una vez por semana, compra ropa una vez por mes y electrodomésticos una o dos veces por año, y los precios del café, los diarios o la nafta suben mientras los de la ropa y los electrodomésticos bajan, uno cree que la inflación va con los precios de los primeros, pero en realidad son los precios de los segundos los que tienen más peso en la canasta y en el cálculo del índice.

Por eso los belgas no le creen a su IPC, ni los alemanes tampoco, pero para poder diferenciar entre esos efectos se necesita un índice de precios confiable y un instituto de estadísticas creíble.

11 comentarios:

Jorge Devincenzi dijo...

Es como la percepción de inseguridad. Todos imaginamos estar viviendo en Beirut

pc dijo...

Tambien hay un sesgo hacia registrar las subas pero no las bajas, como hay un sesgo a registrar los penales que no nos dan pero no a registrar los que nos regalan (y cuando admitimos que nos regalaron un penal decimos que "apenas compensa la cantidad de penales que no nos dieron en el pasado").

Hace dos meses recuerdo haber tenido una conversacion entre amigos en la que salio el tema del "azucar a 6 pesos". Yo acabo de comprar un kilo de azucar a $3.89 (en supermercado Dia), pero dudo que en la proxima reunion salga el tema de "como bajo el azucar" (salvo que yo saque el tema).

Ana C. dijo...

Me puedo imaginar la escena donde PC dice: "¡Cómo bajó el azúcar!" en lugar de hablar de penales mal cobrados.

pc dijo...

Sí, es dificil de imaginar, no?

Stovokor dijo...

En nuestro país se embromo la cosa cuando en enero de 2007 se reemplazaron dos mediciones “reales” por “inventadas”
Se reemplazaron los aumentos realmente medidos de los alquileres de turismo, por el acuerdo con las cámaras de turismo.
Y se reemplazo el precio de aumento de prepaga. Se lo desdoblo en “cobertura total” y “cobertura limitada con pago extra al ser usado”.
El 85% eligió el primero, y se uso el segundo por que daba menos.
Después directamente se voló la base de datos, por que los medios se hacían un festín con los precios que decían haber encontrado.

Yo estoy jodido, y por arriba claramente del índice de inflación oficial. Meto los números al MSMoney, y en lo que más gasto es en comida.
Las galletitas oreo bañadas en chocolate (pack de 12 unidades) fueron de $5 a $7. Y hace una semana llegaron a $13

Y el monitor que compre hace un año Samsung 2350, paso de $1000, a $1500

¡Ahora hay inflación en tecnología y en dólares también!
¿Cómo diablos la tecnología que se deprecia con modelos nuevos, sube de precio?

El Bosnio dijo...

Creo que tan importante como tener un instituto creible, es tener uno creido.

Si es creido, hay paz, hay una sensacion de tranquilidad. Cada quien construye valor en lo suyo y usa relativamente poco el indice y las estadisticas.

Como asi como pasa con las agencias de riesgo, se puede vivir con agencias no creibles (como vivimos durante decadas), pero es sofocante vivir con agencias no creidas (como sucede actualmente).

La relacion entre creibles y creidas es tema de debate, mi impresion es que es una relacion mas que labil.

Ana C. dijo...

La credibilidad se construye siendo creíble.

desvinchado dijo...

Post numero 32.002 sobre el indec en la BEA. Como debe romper las bolas no? Digo, como profesional de la economia no?

El del 0.33% dijo...

Una vez más, demostrado que los índices de inflación no sirven como ancla de nada.

Ana C. dijo...

A lo mejor el 32% que sí cree es relevante para la toma de decisiones informadas, El del 0.33%.

El Bosnio dijo...

Ana, creo que habiendo tantos casos de indices creidos por tanto tiempo que no eran creibles, al menos tenemos que dudar que ser creible sea una condiciones sin e qua non para ser creido.

Seria necio decir que no ayuda o que es contraproducente. Pero dista de ser necesario. Hay muchos otros factores. Podria listarlos pero me cuesta estimar su importancia relativa (es casi sinonimo a decir que no conozco los factores -)